
En un pequeño pueblo en Powell River, Columbia Británica, Canadá, un espeluznante incidente que involucra a supuestas «brujas devoradoras de cadáveres» ha llamado la atención tanto de los lugareños como de los usuarios de las redes sociales de todo el mundo.
Corinea Stanhope, una enfermera de 36 años y entusiasta de la naturaleza, afirma haber presenciado y documentado un extraño «ritual de comer cadáveres» que involucraba a dos personas no identificadas. Las imágenes inquietantes, compartidas por Stanhope en las redes sociales, han provocado un frenesí de especulaciones, con algunas sugiriendo una broma mientras que otras profundizan en los reinos de lo sobrenatural.
El incidente peculiar se desarrolló cuando Stanhope tropezó con el cadáver de un ciervo en su jardín. Intrigada por la posible actividad de la vida silvestre que rodeaba el cadáver, decidió observar el sitio en busca de signos de criaturas. Poco esperaba la escalofriante escena que le esperaba.
Luego de revisar los registros con su abuelo Bob, de 76 años, Stanhope se sorprendió por lo que presenció. Las imágenes capturadas parecían mostrar dos figuras, adornadas con cabello negro largo y enmarañado, escasamente vestidas. Las figuras parecían involucradas en alguna actividad misteriosa, dejando a Stanhope perturbado y perplejo.

Si bien algunos han especulado que el incidente puede no ser más que una broma elaborada, Stanhope tiene la esperanza de que los individuos simplemente buscaban una emoción o estaban bajo la influencia de sustancias que alteran la mente. Su abuelo, Bob, la disuadió de involucrar a las autoridades, destacando que técnicamente no había ocurrido ninguna actividad ilegal.
La publicación de las espeluznantes fotos en línea incendió las redes sociales y los usuarios expresaron una variedad de reacciones. Algunos descartaron el incidente como un engaño, mientras que otros se aventuraron en teorías más fantásticas que involucraban rituales satánicos o entidades paranormales. Es importante tener en cuenta que el término «brujas» se acuñó en las publicaciones de las redes sociales, pero desde entonces ha llamado la atención en los titulares de los medios.
No hay evidencia concreta que vincule las imágenes con la brujería, el paganismo o cualquier otra práctica oculta. Sin embargo, Fox News y ciertos medios de comunicación utilizaron el término «bruja» en sus titulares.1

Los críticos han planteado dudas sobre la autenticidad de las imágenes, señalando los ángulos convenientes que oscurecen deliberadamente la identidad de las figuras. La ausencia de imágenes de video también ha alimentado el escepticismo, lo que lleva a algunos a dudar de todo el evento.
Los residentes locales, hipnotizados por las extrañas fotografías, ofrecieron sus propias interpretaciones, que iban desde brujas hasta espíritus malignos o demonios.
Según los periodistas, es fundamental abordar esta situación con cautela, teniendo en cuenta la limitada información disponible y la ausencia de pruebas sustanciales que vinculen las imágenes a un contexto o sistema de creencias específico. Si bien las fotografías pueden evocar una sensación de inquietud, es vital no sucumbir a suposiciones infundadas o sensacionalismo.
En la era de las redes sociales, las historias sensacionalistas tienen el poder de captar nuestra atención y encender discusiones fervientes. El supuesto incidente del «ritual de comer cadáveres» ejemplifica el poder de las redes sociales para amplificar y perpetuar narraciones intrigantes. A medida que los usuarios comparten y comentan tales historias, pueden volverse virales rápidamente, cautivando a las audiencias mucho más allá de su alcance original.
Según los psicólogos, la fascinación humana por lo sobrenatural está muy arraigada en nuestra psique colectiva. A lo largo de la historia, los cuentos de brujas, demonios y prácticas ocultas han cautivado nuestra imaginación. La supuesta historia de las «brujas devoradoras de cadáveres» aprovechó esta fascinación psicológica, provocando fuertes respuestas emocionales y alimentando discusiones en las redes sociales.
Sin embargo, es crucial abordar tales fenómenos con pensamiento crítico y escepticismo. El poder de las imágenes visuales juega un papel importante en la configuración de nuestras percepciones e interpretaciones. Las figuras de cabello negro en las fotografías, representadas parcialmente desnudas y realizando acciones peculiares, desencadenaron una variedad de reacciones. Sin embargo, es esencial preguntarse si estas imágenes realmente representan brujas o son simplemente un producto de la especulación creativa y la mala interpretación.
El sensacionalismo que rodeó el supuesto incidente del «ritual de comer cadáveres» generó preocupaciones de apropiación cultural y tergiversación. El término «brujas» surgió en las publicaciones de las redes sociales, pero rápidamente se apoderó de los titulares de los medios, lo que generó suposiciones y estereotipos que perpetúan los conceptos erróneos sobre la brujería, el paganismo y otras prácticas ocultas. Los críticos dicen que es vital reconocer el daño potencial causado por las representaciones sensacionalistas de los medios que ignoran el significado cultural y religioso de tales prácticas.
La apropiación cultural ocurre cuando se toman prestados o imitan elementos de una cultura sin la debida comprensión o respeto. En este contexto, la asociación apresurada de las figuras de las fotografías con brujas refleja una forma potencial de apropiación cultural.
- Fox News by Jon Brown, foxnews.com, Published June 6, 2023[↩]