La cultura Tashtyk y las misteriosas máscaras funerarias del valle del Yeniséi

Máscaras funerarias de la cultura Tashtyk
Máscaras funerarias de la cultura Tashtyk, de casi 1800 años (Museo del Hermitage)
Foto: dibattista (Flickr) ©️CC BY-SA 2.0

La Cultura Tashtyk fue una de las culturas arqueológicas que surgieron en Siberia durante la Edad del Hierro. En muchos aspectos, puede considerarse la sucesora de la cultura Tagar.

Contexto geográfico

Situada en el corazón del valle del Yeniséi en Siberia, la cultura Tashtyk surgió durante la Edad del Hierro tardía, proyectando su brillo histórico desde el siglo I hasta el siglo IV. Ubicado en la depresión de Minusinsk, este fenómeno cultural floreció entre los siglos I y IV, dejando una marca indeleble en el paisaje histórico de la región.

Ubicación de la cultura Tashtyk
Ubicación de la cultura Tashtyk

El valle del Yeniséi ofreció un terreno fértil para que la cultura Tashtyk echara raíces y prosperara. Limitada por el majestuoso río Yeniséi por un lado y flanqueada por las montañas Sayan por el otro, el contexto geográfico de esta región jugó un papel fundamental en la configuración del estilo de vida Tashtyk. El río no sólo era una importante fuente de agua para la agricultura, sino también una ruta comercial natural para la cultura Tashtyk.

La Depresión de Minusinsk, con su terreno suavemente ondulado y su suelo fértil, favoreció las prácticas agrícolas, lo que permitió al pueblo Tashtyk dedicarse a la agricultura y cultivar cultivos que sustentaban a su floreciente población. Además, el paisaje circundante ofrecía amplias tierras de pastoreo para el pastoreo del ganado, lo que contribuía aún más a sus estrategias de subsistencia.

Viaje al pasado

La cultura Tashtyk, meticulosamente dilucidada a través de los estudios realizados por el arqueólogo ruso Sergei Teploukhov, aludió a una narrativa matizada de la evolución cultural. Inicialmente, las influencias indoeuropeas parecían haberse entretejido en el tejido cultural, para luego ceder su dominio al firme avance de los kirguís Yeniséi, una transformación que se desarrolló alrededor del siglo III. La adopción por parte de la cultura tashtyk de los kirguís Yeniséi tuvo una complejidad matizada que deja huellas en la narrativa cultural.

En medio del esplendor de la región de Yeniséi, la cultura Tashtyk floreció, dejando a su paso un rastro de asentamientos y castros que siguen siendo objeto de investigaciones arqueológicas modernas. Las más profundamente resonantes entre sus hazañas arquitectónicas fueron las monumentales estructuras de criptas-túmulos, que, tras la excavación, divulgaron un tesoro de vasijas de arcilla y metal, ornamentos de intrincado diseño y artefactos que despiertan la imaginación. Profundizando más, se reveló el enigma de las tallas petrográficas, grabando historias en las piedras.

Artefactos de la cultura Tashtyk
Artefactos de la cultura Tashtyk (Museo Regional de Krasnoyarsk)
Foto: Vyacheslav Bukharov (Wikimedia) ©️CC BY-SA 4.0

Las tumbas susurraban secretos del pasado, revelando réplicas de cuero de formas humanas, con sus cabezas envueltas en telas delicadas y adornadas con pigmentos vibrantes. En particular, estas figuras acunaban dentro de ellas pequeñas bolsas de cuero, un testimonio del simbolismo y el ritual, tal vez representando la esencia del estómago y albergando las cenizas de los difuntos. Cerca de allí se encontraban miniaturas de espadas, flechas y carcaj, lo que subrayaba la reverencia por el más allá y la afinidad por las réplicas a escala reducida. Este mosaico cultural, adornado con motivos animales que reflejan el estilo escito-altaico, llevaba la influencia adicional del lejano reino chino, forjando vínculos entre mundos divergentes.

En los alrededores de Minusinsk, dentro del cementerio de Oglahty, las exploraciones de Leonid Kyzlasov desenterraron un cuadro cautivador de momias adornadas con ornamentadas máscaras funerarias de yeso. Estas máscaras, que evocan rasgos de Eurasia occidental con un toque de influencia del este de Asia, revelan una cautivadora fusión de historias ancestrales. ¿Qué historias cuentan estas máscaras sobre las personas que adornaban? En conjunto, sombreros de piel, prendas de seda y calzado intactos emergieron del abrazo de la tierra, resonando con susurros de una era pasada. Hoy en día, estos restos adornan las salas sagradas del Museo del Hermitage en San Petersburgo, el Museo Regional de Krasnoyarsk y el Museo Histórico Estatal de Moscú, y resumen el legado de la cultura Tashtyk y las misteriosas historias que dejó.

Máscaras funerarias de la cultura Tashtyk (República de Jakasia)
Máscaras funerarias de la cultura Tashtyk (República de Jakasia)
Foto: Joanbanjo (Wikimedia) ©️CC BY-SA 3.0

El papel de las máscaras funerarias en la cultura Tashtyk

Las máscaras funerarias dentro de la cultura Tashtyk tienen un profundo significado como artefactos culturales que manifiestan ecos duraderos de la antigüedad y rituales imbuidos de connotaciones mortuorias. Los atributos y funciones que caracterizan estas máscaras exhiben una variedad dinámica basada en perspectivas y paradigmas teóricos divergentes.

Las máscaras, típicamente elaboradas con materiales como bronce, madera o cerámica, representan de manera intrincada el rostro fisionómico del sujeto fallecido. Se cree que estas máscaras, que emanan de estos rostros, una sinergia de devoción religiosa y espiritualidad, protegieron el núcleo del difunto y ayudaron en su viaje al más allá. Algunos principios proponen la conjetura de que estas máscaras podrían haber sido fundamentales para presentar simbólicamente el alma del difunto ante entidades divinas, asegurando así su aprobación e incorporación.

Un punto de vista alternativo postula las máscaras funerarias como vanguardias simbólicas del legado del difunto, funcionando como artefactos mnemotécnicos que garantizan el recuerdo perpetuo del individuo dentro de la matriz familiar. Es concebible que estas máscaras funcionaran como custodios del estatus sociopolítico y la integridad de la reputación, asumiendo así un papel de considerable importancia. Dentro de esta rúbrica, las máscaras operan como conductos para mantener recuerdos póstumos y engendrar continuidad en el tejido de vínculos intergeneracionales.

Una tesis alternativa plantea la idea de que las máscaras fueron elaboradas con el objetivo explícito de establecer una interfaz con el reino de los muertos. En épocas pasadas, una creencia predominante postulaba la interacción de las almas más allá de la división terrenal. En este contexto, es plausible que estas máscaras fueran concebidas como instrumentos que facilitaban la transición de las almas al dominio de los muertos y, además, facilitaban su interacción con el reino de los vivos.